…de lo bonito que es…




Del Chef japonés (y Food Art) Takehiro Kishimoto
De fácil digestión. Para que el lunes sea más liviano…
Puedes poner un monstruo en uno de tus guisos.
O dedicarte a hacer bonitas creaciones artísticas con un par de bocadillos.

Con un poco de ketchup, pintas un retrato. Es arte efímero…
y…¿Un té mientras escuchas Yellow Submarine?
Y ayuda en los lunes de invierno…

Un tenedor que inspira al artista…

O el artista ( en este caso William Kass) que utiliza la comida para su mundo en miniatura.
Una pareja a la que le llueve azúcar.

Quiero que me traigan las pizzas, así.
Y para acabar, tres infografías publicitarias de Zomato que os plantea una pregunta.
¿De qué eres tú?…
Yo soy de dejarme el borde de la masa y de comer el chocolate por piezas (me fastidia cuando me queda asimétrico) pero…Estoy en pleno desacuerdo con esta tercera infografía. Ahí, se puede ser de los dos tipos.
Feliz lunes.
Si me dan a elegir entre una Coca Cola en lata o botella de plástico a una Coca Cola en botellín de vidrio, no me lo pienso ni un segundo. Cualquier cosa que me des en vidrio, me gusta mucho más. A veces, he dejado de beber una Coca Cola simplemente porque iba en lata…
Lo mismo me pasa con la cerveza , con el vino , con el aceite, con la leche.
En el caso del vino y el aceite, no se puede concebir máxima calidad sin envase de vidrio ( eso lo saben muy bien los italianos que hacen virguerías con nuestro aceite).
La leche ya no se encuentra de cristal fácilmente. Y es una pena, esa botella es como un placebo y actúa en mi cerebro , alterando mi percepción de las cosas. En esa botella de vidrio la leche me sabe mejor… ¿O es qué realmente sabe mejor?
Puede ser una cuestión psicológica, vale , pero ( es acerca de la Coca Cola) : “Sara Risch, química y miembro del Instituto de Técnicos de Alimentos, sostiene que es posible que se den casos de alteración del sabor, aunque muy sutiles. Por ejemplo, el polímero que reviste las latas de aluminio puede absorber el sabor soluble del refresco. Lo mismo pasaría en las botellas de plástico, en las que el acetaldehído del plástico podría transferirse al refresco. Las de vidrio, pues, conservarían el sabor más puro, pues el vidrio es el material más inerte de todos”
Definitivamente, prefiero el vidrio . Es natural, es sano y es reciclable hasta el infinito.
Aunque sea psicológico…
NB 1 : Más información sobre el vidrio en Friends of Glass.
NB 2 : En casa , la leche es de El Cantero de Letur. Bio y en vidrio!
Hay gente capaz de proyectar el uso de una cosa , en uno completamente diferente al ideado originariamente. Tienen esa capacidad creativa…
Ven un neumático e inmediatamente piensan : «Lo pinto de un color fluor y le pongo unas ruedecitas «…
Y , encima, queda bien.
O se encuentran con unos cubiertos desparejados y exclaman : ¡Mira, un perchero! (o un móvil, unas flores o un espejo…)
Dónde yo veo botellas de cristal, ellos ven jarrones con flores.
¿Botas de agua que ya no sirven? Nada, maceteros coloristas…
Cajas, pallets =Mesas y organizadores. Y en colores pastel ( rosa chicle y mint)
Unos escurridores, se convierten en fantásticas lámparas de cocina.
Y…. lo que se puede hacer con una huevera … Convertirla en un «mete-todo»., un contenedor para ese cajón en el que tenemos esas cosas que no sirven para nada.
Cosa 1 : El tenedor en espiral.
Si algo le fastidia a un italiano, es que pidas una cucharita para poder enrollar los espaguetis en el tenedor.
Parecerá una tontería pero hay quién está un poco perjudicado en lo de la motricidad fina y le cuestan estas cosas ( ya no te digo lo de los palillos Chinos). Hola. Soy uno de esos seres que NO sabe enrollar los espaguetis con rapidez y habilidad y siempre me pido la maldita cuchara. En Italia, lo hago con timidez… Así que este tenedor rizadito, me va de perlas.
Cosa 2 : El punto definitivo.
Hablo de los puntos de libros. Los pierdo t-o-d-o-s. Ninguno de mis libros, acaba sin marcas en las páginas. Las esquinitas ( eso sí, doblez pequeñita y delicada) van sufriendo mi falta de memoria…Y por la noche, cuando ya me duermo, a la vez que voy cerrando el libro , no me digas que busque el punto que se me ha caído, en algún lugar…
Esta preciosa lámpara, sirve para iluminar tus momentos de lectura y, a la vez, es el punto definitivo. Ambos diseños del serbio Damjan Stankovic.
Cosa 3 : Expresando indignación.
Por la Ley de Murphy que afecta a la meteorología : Llueve cuando no toca, o , peor, no llueve cuando se agradecería que lloviera ( maldito polén amarillo!). Zeus, haz algo…Please.
Diseñado por Art Lebedev Studio.
N.B :ZEUS (Júpiter): hijo de Crono y Rea; rey del Universo; dios del cielo y la meteorología: nubes, lluvias, vientos y tormentas; Homero le llama «rey de los dioses y de los hombres», «amontonador de nubes», «portador de la égida»; sus atributos son el rayo, el águila y el cetro.
Como pasa el tiempo!!! Hace seis años, guarde unas guindillas en un frasco de cristal.

Era la época en la que las guindillas, invadían mi pequeño huerto urbano…
Ordenando el armario de especias de la cocina, lo he encontrado al fondo, perdido, desgastado…

Ya se han borrado las letras que escribí: si te pica mucho un alimento, no bebas agua, bebe leche. Neutraliza la capsaicina, la responsable del fuego ardiente en tu paladar.

Ya no son guindillas rojas. Han perdido el color y textura. Están arrugaditas y viejas pero… su poder picante sigue intacto. Doy fe.
Bendita leche.
Unos vinilos por aquí…




Unos vinilos por allá…




Me ha dado por las botellas de agua. Hace ya un tiempo, visité una Masía preciosa que la propietaria había decorado personalmente. En una pared enorme, de estanterías blancas de obra , había dispuesto multitud de botellas de vidrio ( blancas, transparentes, verdes, azules…) iluminadas estratégicamente . La idea se quedó archivada en algún lugar de mi mente y, en un viaje, me quedé prendada de una una preciosa botella de agua con gas que viajó conmigo muchos kilómetros, perfectamente protegida entre hojas de periódico… Otros momentos viajeros (y no) han hecho crecer mi colección pero de forma sostenida y prudente.Mi objetivo : emular, en un formato a mi medida, lo que ví en aquella Masía…

En estos últimos tiempos, las cosas han cambiado. El agua se ha puesto de moda, las botellas (magníficas) aparecen como setas y en los lugares más accesibles: ya no es necesario ir a un establecimiento gourmet . En el Hiper de turno, los fabricantes muestran sus creaciones de «alta costura» en botellas y yo, con mi vena de coleccionista de agua, voy loca.


Lo bueno del tema es que, aunque pague cara el agua, me sale barata la colección. Soy fácil de regalar ( este verano me han hecho feliz con la Edición Limitada de Vichy Catalán-mi agua favorita-y una siberiana , de botella excelente) y, sin quererlo, estoy haciendo acopio de uno de los bienes naturales más preciados que , vete tú a saber , un día puede valer una fortuna por su escasez… Tal como vamos, es como una inversión de futuro.

Lo malo es que ante la invasión de packaging botelleril, he pasado de crear una colección de recuerdos de aguas ( ligadas a una ciudad, país o situación) a una colección de aguas del Supermercado que, a nivel de diseño me complacen pero tienen de emocional lo mismo que el carrito…

Y, aún sabiéndolo, es superior a mí y si veo una botella en el pasillo de aguas que me gusta ( eso sí, siempre de vidrio), la deposito con mimo en mi carrito y le otorgo una plaza de por vida en mi estantería virtual .
Ahora, sólo me falta la Masía. ;-)
Con todos los ingredientes y una perfecta planificación temporal y de infraestructura, intenté ( remarco el verbo intentar) hacer las piruletas de yogurt helado que os comentaba ayer.
Eran algo así…
Bien, no di con el punto de “consistencia” adecuado ( y mira que fui añadiendo yogurt artesano -buenísimo- y piña helada ( la congelé el día antes) pero…ni así. Todos los ingredientes, eran apropiados. La piña , dulce. La miel, casera…
Mi gozo en un pozo que no en una piruleta.
Al final, ya renunciando ( por lo menos en este intento) a la preciada y preciosa piruleta, utilicé un molde de silicona para hacer bizcochitos y …
Admito que esto se puede considerar como «fail» en toda regla de las piruletas… ; – )
La receta-reto es de “The Decorated Cookie”
Son piruletas de yogurt helado. Suena bien y parece fácil y eso , me temo que no es bueno porque cuando suena bien y parece fácil…a mí no me sale. ; – )
Ya tengo la lista de ingredientes y accesorios ( no tengo papel encerado) y ya he decidido que voy a hacer mis piruletas de fresa y de piña.
La receta , por si alguien se siente retado, es la siguiente .
Ingredientes
1 taza ( tipo café con leche) de fruta congelada (piña y fresa que se debe congelar antes . Para adornar, cortar unas tiritas.)
1 taza de yogur natural
1 a 2 cucharadas de miel
Palos de piruleta ( Cómo no sé dónde encontrar este palo tan específico , voy a utilizar los palitos de madera para los pinchos y brochetas)
Manga pastelera
Bandeja de horno ( a mí no me cabe en el congelador, así que unas bandejitas de inox que sí que me caben)
Papel encerado
Procedimiento :
Todos los ingredientes en la batidora. La consistencia no debe ser demasiado líquida para poder dar forma de piruleta. Hay que tener yogurt a mano para rectificar en caso de licuar demasiado.
Forrar la bandeja-que te quepa en el congelador- con una hoja de papel encerado. Colocar un palo de lollipop/brocheta en la bandeja. Hacemos las piruletas con la manga pastelera y las colocamos en el congelador.
Pasados unos 10 minutos (dice la receta original que 5 minutos pero a mí me parece poco ; – ) , sacas la bandeja del congelador y decoras. Yo pondré unas tiritas de piña y fresa natural.
Vuelta al congelador y en dos horas, tenemos las piruletas de yogurt helado…O no… pero ¿a qué suena bien y parece fácil?…