Re Re Restyling

Muchas veces repintado…

Era de tonos dorados y cobrizos metálicos. Tuve una época muy de brillos…Este cuadro lo tenía mi madre en su casa que , igual que ella, se va modernizando a medida que va cumpliendo años. Así que, ahora, en el salón de tonos neutros el brilli brilli del pasado , no pintaba nada.

Restyling al canto.

A ver si le gusta…

Instagramera de cosas…

He reactivado mi cuenta de Instagram.

Recuerdo una viñeta del ilustrador Jordi Labanda, en la que dos amigas están tomándose un café. La única frase del dibujo era algo así: “Chica, nunca hubiese pensado que estabas mal. ¡En Instagram se te ve tan feliz! “  . Es un buen resumen de lo que muchas veces es esta red social …

Así que la cuenta de El Blog Imperfecto se centra, únicamente, en cuadros y #fotosenfondogris que he ido haciendo y han ido nutriendo el blog durante muchos años.

Es una forma de tener una galería visual de todas esas cosas que, por cierto, me han hecho feliz mientras las hacía.

Y sin filtros. ; – )

Derechos de autor del Árbol de Navidad.

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Derechos de autor (mundiales) del Árbol de Navidad.

El Dios Freyr (Frey) reclama sus derechos de autor . Lo del Árbol de Navidad es de su autoría y desde tiempos ancestrales. Se le debe una fortuna incalculable, la verdad. Frey presenta como pruebas concluyentes, todos los estudios que versan sobre el culto a su divinidad en la tradición escandinava.

Él, el Dios nórdico del sol naciente, de la lluvia y de la fertilidad, es el responsable de que tengamos un abeto en nuestra casa, lleno de bolitas y luces de colores.

 

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En épocas remotas, cuando los hombres guiaban las cuestiones más transcendentales de su existencia con la observación de la naturaleza y sus ciclos, ya se sabía de la importancia vital del sol.

En el solsticio de invierno, cuando las noches eran más largas , se creía que el sol se moría y se celebraban todo tipo de ritos y ofrendas ligados a la luz para ayudar al Astro Rey. Al mismo tiempo, era el momento de renovación. De la aparición del nuevo sol , el nuevo período que volvería a hacer más largos los días.

 

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El Dios Frey representaba ese nuevo sol y el 26 diciembre, el día de su nacimiento , se celebraban ritos en su honor. La leyenda dice que la gente se reunía ante un árbol de esos bosques nórdicos ( que representaba el universo) y prendían antorchas para llenarlo de luz. Ese fue el primer árbol de navidad de la historia…

Siglos después, en el año 723, llegaron los cristianos evangelizadores . Un sacerdote llamado Bonifacio vio que en esas tierras germanas se practicaban cultos paganos alrededor de un árbol y decidió “customizar” el diseño y cristianizarlo. En plan brutote, corto el árbol sagrado, y lo sustituyo por un pino que adornó con manzanas (representaban el pecado original) y velas ( luz de Cristo). No existían leyes de Patentes y Registro de Marcas y , por lo tanto, pudo apropiarse de la idea impunemente.

 

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Hoy en día, las manzanas han dado paso a las bolas de colores. Y las velas, a las guirnaldas de lucecitas… Montamos Belenes, cantamos villancicos y nos visitan Santa Claus y los Reyes Magos pero… La idea básica de decorar un árbol en diciembre, hacer ofrendas y fiestas a su alrededor ( o sea, la atmósfera navideña) es originaria del Dios Frey .

Y es por eso que reivindica sus Derechos de Autor.

Queda dicho.

NB1  : Mitología Nórdica. Freyr (Frey) poseía la Espada de la Victoria (que sabía moverse y luchar sola por los aires). Posee el jabalí de oro Gullinbursti , que tira de un carro tan deprisa como un caballo al galope, y cuyo resplandor ilumina la noche; también el barco Skíodbladnir y un caballo que ignora todos los obstáculos. Es el dios favorito de los elfos.

NB2  : Ese árbol pequeñito y desastrado de la primera imagen, es el árbol de navidad de Charlie Brown de los Peanuts.

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NB3 : Este , hecho  con perchas, no sé si  debería pagar los derechos al Dios Frey… No es un árbol…

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¿Qué quieres ser de mayor?

Esa pregunta trascendental, se sigue haciendo a todos los niños y niñas desde tiempos inmemoriales…

Hay quien proclama a los cuatro vientos que será aventurero. O médico. O arquitecta. O. abogado. O domadora de elefantes… Incluso hay quien responde que le gustaría ser un genio…

Mi madre era fan de John Lennon y siempre me leía una cita que atribuyen al artista.

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Así que, supongo, que, por una programación mental iniciada desde niño, yo tenía claro que lo que quería ser de mayor era… feliz.

Pero, me temo que va a ser imposible. He analizado los programas de todas Universidades que imparten la Licenciatura de la Felicidad y he buscado la forma de hacer menos créditos por año para reducir la matrícula: quitar la asignatura de Los Placeres Sencillos de la Vida, la del Diálogo y la Empatía, y la del Valor Material vs al Valor Espiritual, pero… he pedido becas, he solicitado financiación en varios bancos y todo, todo me ha sido denegado.

He decidido, que, en base a mis opciones, voy a ser escritor.

La Felicidad es demasiado cara…

#NuevaRealidad (La nevera.)

Tener una “buena nevera” ,como la que zumbaba en casa desde que yo tenía uso de razón,  era una herencia psicológica de mi querida madre. Se obsesionaba en recomendar la nuestra a cualquier persona que le preguntara y, también, si no se lo preguntaban. La veo, como si estuviera aquí, mostrando su cocina primorosa y, al llegar a la nevera, decir “Esta nevera StopTime es la mejor nevera del mundo. Más de veinte años funcionando y no me ha dado ningún problema. Si alguna vez te cambias de nevera, cómprate una StopTime”.  Así que cuando llegó el momento de comprar una buena nevera, decidí honrar a mi madre y comprar una StopTime , por supuesto.

La fábrica había cerrado hacía años, y las únicas neveras StopTime que había en el mercado, eran de segunda mano. Mi madre ya compró la suya en una tienda de productos con tara: “El StopTime no funciona”, rezaba la cartulina con el gran círculo rojo que marcaba el precio y la tara. Pero era tan barata y estaba tan nueva, que mi madre se la llevó a casa y nunca encontró el defecto. “La nevera va perfectamente. Se habrán equivocado… No sé qué será el “Stop-Time- ese” pero, a mí, la nevera me va de fábula”

Mi presupuesto era más bien escaso así que compré una StopTime de Nivel 1 ( era la más barata), con sus dos cajones para fruta y verdura, un cajón para la carne y el pescado y todos los estantes de cristal. La estaba limpiando cuando encontré el manual de instrucciones, justamente en la zona de los huevos. Recuerdo que me sorprendió que el anterior propietario lo hubiese conservado pero no le hice mucho caso. Lo metí en el cajón en el que estaban todos los manuales y garantías de todos los aparatos que tenía en mi  piso y me olvidé de él.

Creí que abriría con poca frecuencia el cajón de los manuales  pero la televisión me hizo un puffff! extraño y se puso de color azul. Un sábado por la noche… Cómo tenía claro que hasta el lunes no podría solucionar la avería, me leí el manual con la esperanza de encontrar una solución que, evidentemente, no encontré. Aburrida , me puse a ordenar los manuales y garantías y me encontré con el de la nevera “StopTime”. Al ponerlo en su lugar, una pequeña hoja plateada, se deslizó de su interior y cayó suavemente en el centro de la mesa. Era una cuartilla de un delicado color plata que contenía un texto caligrafiado. El hecho de ver una nota manuscrita me sonó fuera de lugar en un manual técnico y la leí con curiosidad, sabiendo que sería una nota del antiguo propietario que se había traspapelado.Pero no era una carta de amor, ni una felicitación de navidad, ni un poema. Ponía esto:

StopTime Nivel 1

No permite traslación.

Indicar hora y lugar.

Duración máxima de Nivel 1: Cinco horas.

Yo creo que fue lo del aburrimiento, que era sábado,  no tenía plan  y no me apetecía ver una serie en el iPad. No lo sé, pero, de repente, en vez de leer stoptime cómo mi madre lo había pronunciado toda la vida ( no “taim” , si “time” ), me di cuenta que la nevera se llamaba “ParaTiempo”.  Y algo hizo click en mi cerebro y pensé: Parar, detener…congelar.  Hora y lugar. ¿Y si…?. Duración máxima…

Abrí mi portátil y tecleé el texto de la nota en Google…Tras muchas horas de búsqueda , encontré un foro de nombre “ TimeStoppers”  que me proporcionó la información definitiva :  ¡Mi nevera congelaba el tiempo!

Me reí muchísimo leyendo las historias de ese grupo de fanáticos de la marca StopTime que hasta tenían un grupo en facebook . Era gente con una gran inventiva , que explicaban historias graciosísimas sobre las cosas qué habían hecho al congelar el tiempo en su nevera “StopTime”. Recuerdo que pensé que a mi madre le hubiese encantado…

Al ir a preparar la cena, abrí la nevera y la miré con atención. Nivel 1. Según lo que había leído , era el nivel más básico de congelación de tiempo. No permitía la traslación, o sea, debías moverte tú mismo al lugar dónde se iba a congelar el tiempo. Si tenías una nevera de Nivel 5, no sólo lo congelaba allí dónde tu eligieras sino que, además, te transportaba al escenario en el que ocurría el parón de forma instantánea. La mayoría de los que escribían en el foro, explicaban que lo único que se debía hacer era escribir, el lugar, la fecha y la hora ( solo funcionaba hacia el futuro) en un papelito y dejarlo en la nevera en el compartimento secreto “StopTime”. Al cerrarlo, se activaba la función: congelaría el tiempo en ese momento y lugar y , en mi caso, con nevera Nivel 1, la congelación duraría cinco horas como máximo. Lo mejor de todo era que el Stopper (el propietario de la nevera, o sea yo? ), no se paraba y podía campar a sus anchas por la “zona de congelamiento”. Era genial cómo idea para una novela de ficción

Mientras cenaba, mi mente no dejaba de pensar en esa tontería del StopTime y el grupo de pirados que formaban aquel extraño foro . Pero sobre todo, lo que me acosaba era : ¿Qué situación, momento, lugar, elegiría yo para que se congelara el tiempo?…y curiosear, claro. Me dejé llevar : si se podía hacer eso y de forma tan sencilla ¿Por qué no probarlo?.  Una cuestión era el tiempo : debía ser en el futuro porque no había forma alguna de viajar hacia atrás . Y la otra era que para poder realizar una prueba fiable, el lugar debería ser asequible para mí.

Al día siguiente, iba a asistir a una comida familiar en casa de mi hermano. ¿Por qué no hacer la prueba allí? Valoré que si ponía mi papelito en el StopTime y no ocurría nada, nadie se iba a enterar y …si ocurría…

La hora que tarda en activarse pasó volando y cuando acabó, me encontraba sentada al lado de mi hermano en la mesa. Él se había quedado con media palabra en la boca… Al cumplirse el tiempo programado para el congelamiento, la conversación siguió fluyendo con normalidad . Se restituyó la secuencia temporal cómo si no hubiese pasado nada. Yo estaba muda de la emoción. ¡Joder! Me había paseado a mis anchas por la casa. Había cotilleado los cajones de la mesilla de noche de mi cuñada.Me situé en frente de todos los miembros de la familia haciendo muecas y gritándoles. Nada. Estaban todos…congelados.

El descubrimiento extraordinario del funcionamiento del StopTime, me había dejado conmocionada y muy cansada. A partir del momento en que me di cuenta de lo que podía hacer con la nevera, no dejé de pensar en todo lo que podía hacer con la nevera.Me inscribí en el foro de Sttopers y rescaté las experiencias de otros. No hice caso al mensaje en rojo que ponía ADVERTENCIA: PARA LOS USUARIOS DE STOPTIME y me dediqué a congelar el tiempo a diestro y siniestro.

Me he convertido en una ladrona: he parado el tiempo en Bancos y Cajas, en Armani, en Apple , en cualquier lugar del que quisiera algo.  Mi mini piso está a rebosar de cosas preciosas. He visitado museos sin nadie que me molestara . He fisgoneado en mi expediente de Recursos Humanos en el trabajo, he robado y copiado las preguntas de mi examen para las oposiciones, he espiado en empresas de la competencia…He hecho esas cosas y muchas más pero, ayer,  leí el mensaje de ADVERTENCIA del foro  y comprendí qué es lo que me está pasando.

Es terrible y ya no hay marcha atrás .El tiempo se congela pero los Stoppers, no sólo seguimos en el eje temporal si no que, además, vamos acelerados. Mi tiempo congelado tiene una proporción entre tiempo consumido y horas.  Una hora en acción cuando todo se para, equivale a unos seis meses de tiempo real. Humano.

Si hago la cuenta de la vieja -¡Qué ironía!-, me sale que me he sumado unos veinte años de tiempo normal. Tengo veinticinco pero aparento el doble…

El cansancio,  las canas, esas arrugas que no deberían estar ahí a los veinticinco años…La mirada extraña de los que me conocen que no me reconocen en esta mujer…mayor.

Y no puedo parar de congelar… Es superior a mí. La nevera me posee…

La única solución es deshacerme de ella.

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Regalo nevera StopTime de Nivel 1.

En perfecto estado.

Urgente ( por mudanza)

#Encasa (lo de la rutina 2)

El tema de la planificación: sigo sin perfeccionarla. Hay una serie de tareas que marcan el inicio del día y que , dependiendo del estado de la situación , pueden trastocar mis planes porque…¡ tengo planes!  e, incluso,  antes de ir a dormir, pienso lo que voy a hacer el día siguiente.

Lo primero tras toda la rutina del despertar, es “la ronda de llamadas”. Y la duración de estas, depende de muchos factores, pero me pueden consumir un tercio del tiempo. Bien invertido, por cierto.

Después están los factores externos. Planificar limpiar los cristales o aceitar la mesa de teca ( porque el año pasado compre más aceite del que debía y lo tenía guardado) y…que llueva. Vale. O querer ordenar todos los cajones del despacho y que, antes de hacerlo, no encuentre la pieza fundamental del trípode de la cámara que siempre está en un lugar concreto e, inexplicablemente, durante el confinamiento, ha desaparecido de mi vista. Resultado: dos horas buscando la pieza sin éxito. Ni San Antonio, ni San Cucufato. Y de ordenar, nada. Más bien, desordenar. Y es que , enseguida, enlazo con la hora de cocinar.

La rutina de ejercicio es la más estable, junto con la ducha diaria y sacarme el pijama sí o sí. Sólo un día, deambulé estilo zombie y despeinada aunque,  como dice Mafalda, lo que tenía mi pelo es libertad de expresión…La verdad,  la experiencia no me ha compensado.

Por lo demás, van pasando los días y no hago nada de lo que tenía previsto, pero, a la vez, no paro de hacer cosas.

Eso sí, el momento de escribir estos posts #Encasa, ya se han convertido en obligatorios y, como ya preveía, totalmente terapéuticos.

Gracias!

Conectados.

Me hacía mucha ilusión llegar al número de 2.000 seguidores en este Blog Imperfecto. Nunca lo hubiese imaginado… ¡Gracias! (ruborizadas).

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El grupo es heterogéneo, de intereses diversos y, lo que más me gusta, de muchos países. Aunque muchos de los posts del blog son universales , como los de esa luna que vemos todos cada día, hoy estamos más conectados que nunca.

El motivo era impensable. ¿Un virus? Pues, sí. Conectados por un virus…

En cada país , según su nivel de contagio,  se han tomado medidas diferentes y de diferente intensidad, pero, en todo el planeta, aunque algunos dirigentes quieran hacer oídos sordos al Covid-19, sabemos lo que es una pandemia y que nos va a afectar a todos.

Photo by Captionery on Unsplash

La parte positiva de todo este tema , que nos preocupa y nos tiene confinados en casa , es que somos parte de la acción preventiva. Somos , todos, elementos indispensables para parar la propagación. Cada acción individual suma muchísimo, exponencialmente.

En el pasado y muchas veces, nos hemos quejado de las cosas de la vida, ante la impotencia o el no querer hacer nada porque no servirá de nada. Esta vez, tenemos potencia y sí que servirá de algo. Es más,  es lo único que servirá.

Gracias por vuestra atención.

Gracias por vuestras 2000 fidelidades.

Gracias, porque estoy segura de que somos parte de la solución.

Seguimos.

Photo by Ron Smith on Unsplash

#FelizNavidad

Ya hemos inaugurado el solsticio de invierno.

Y las vacaciones de invierno.

Y, casi, la Navidad.

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Hay luces en las calles.

Hay colas en las tiendas.

Los niños están felices.

Los adultos se empiezan a estresar.

Y, casi, la Navidad.

Photo by Annie Spratt on Unsplash

Hay tristeza por la presencia de las ausencias.

Hay alegría por todo lo que salió bien.

Hay esperanza por todo lo que saldrá mejor.

Y, casi, la Navidad.

Photo by Annie Spratt on Unsplash

Que sea feliz!

Photo by Tom Rickhuss on Unsplash

 

Una colchoneta.

Llega ese momento del año, en el que el Blog Imperfecto se va de vacaciones.

Este año, no ha hecho planes. Ninguno. Lo único que me ha pedido este blog, es una colchoneta.

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Solo me pone una limitación: todas menos la del unicornio, tan de moda.

No lo ve claro. En esto de las colchonetas, también hay líneas rojas.

Photo by James Lee on Unsplash

Me pide que sea cómoda y renuncia al accesorio para poner los vasos.

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Sé que es culpa mía. No hay sitio para mí en sus vacaciones. Me ha pedido que lo deje en paz: ni entraditas, ni relatos, ni fotos, ni lunas, ni píldoras. Sólo quiere estar en su colchoneta.

Photo by Víctor Vázquez on Unsplash

Y tanto hablarme de la colchoneta que soy yo la que va a comprarse una.

Felices vacaciones a todos (con o sin colchoneta)!

Algunas fotos.

Estas son algunas fotos que he rescatado tras hacer una limpieza de archivos de mi pobre portátil. Le he hecho un Marie Kondo…

Esta fue la primera fresa que recogí de mi primer intento de huerto urbano en una maceta…

Y este,  el primer tomate…

En esta, me impactó el juego de azules. La cámara no captó los matices…Había más azules...

El primer plano de un fragmento de un móvil de viento «ornamental». La luz y la tela de araña…

Y, para finalizar, el espíritu que se ríe del lunes… Es un antídoto.