Esto es el resultado de una conjunción de tres factores:
1) Día de sol y tranquilidad. Perfecto para terapia antiestrés.
2) Lienzo para reciclar que ya había pintado con fondo de pintura de tiza de color blanco roto.
3) “Restos” del proceso Marie Kondo que llevé a cabo hace un mes.
Estos “restos” son cuentas de pulseras y collares, botones y cualquier cosa susceptible de ser pegada en un cuadro que fui recogiendo en una cajita cuando me dediqué a ordenar todos los cajones de mi casa en un episodio Kondo muy intenso.
Pingback: Otro Marie Kondo Art. | Non Perfect. El blog imperfecto.