Hoy, Pau Donés nos ha dejado y , aunque no lo conocía personalmente, la tristeza la siento cercana.
Lo ví en sus conciertos. En el último en Barcelona, en Octubre del 2018, compramos la entrada VIP : nos hicimos fotos con él y hablamos durante unos instantes.
En persona, además de esta experiencia, hace tres años nos lo encontramos en el ferry de Ibiza a Formentera y viví un «momento fan» que hoy recuerdo con más intensidad.
Hace tres años…
Uno de los pocos “momentos-fan” de mi vida, lo he vivido con Pau Donés. Viajaba en el ferry que te lleva de Ibiza a Formentera. Ya en mi asiento, ojeaba el libro que llevaba para mis días de playa cuando, de reojo, veo que alguien se ubicaba en el asiento que estaba delante del mío. Lo reconocí al instante.
Si me preguntan, hoy, cuál ha sido el mejor concierto al que he ido en mi vida, me quedo con la gira “Reciclando” de Jarabe de Palo en el Palau de la Música de Barcelona en el 2009. Desde ese día, Pau está en mi cuadro de honor de “Experiencias Musicales Excelentes”. No soy de hacer lo que hice, pero…lo hice. Le toqué el hombro. Dije la típica idiotez ¿Eres Pau Donés, ¿no? Idiota la pregunta, básicamente, porque ambos sabíamos que lo era. Respondió muy cordialmente ante el “asalto-fan”.
Le deseé que todo fuera bien (se está tratando de un cáncer) y , después, le hice una pregunta. Tenía a Pau Donés ante mí y… ¿Qué le pregunté?
Lo sigo en Twitter y, justamente, había publicado una foto espectacular de unos huevos fritos con sobrasada de Formentera. Creo recordar que le daba las gracias a Ca La Juani. Pensé que era un restaurante de esos que sólo conocen los que viven allí … Eso fue lo que le pregunté. Dónde estaba Ca La Juani…Después de unos segundos de desconcierto (imaginad: hola soy tu fan, ¿Dónde te comiste esos magníficos huevos de la isla?), se rio y me respondió que era la casa de una amiga suya.
Le deseé lo mejor y nos sentamos de nuevo. Le hice una foto para dejar constancia del encuentro y poder enviársela a una amiga mía que también lo adora.
Su música me acompañará siempre.
Bon viatge, Pau.