Más tiritas…

 

 

Plof!  Ya se me ha vuelto a caer. Ahí la veo, a mis pies.

Me pasa cada mañana …Me despierto más o menos contenta ( eso depende del número de horas que he dormido y la calidad de esas horas), me preparo con un cappuccino increíble que me espabila con el aroma y abro la puerta de casa para dirigirme al buzón.

Si todo ha ido bien (últimamente, los del reparto van un poco locos) tengo la prensa matinal, calentita o fresquita (depende de la estación). Mientras realizo todo este proceso matinal, aún no se me ha caído…

Me siento en la mesa de la cocina. En verano, abro las ventanas( pero bajo un poquito el estor) para que el sol no me deje ciega. Hay un rayo concreto, que siempre incide en mis ojos y que tengo que neutralizar. Dispongo el periódico y paladeo mi cappuccino. El olor a papel y tinta me reconforta…Si analizo la secuencia de acciones, puedo constatar que no se me ha caído.

Entonces, llega el momento. Me detengo en la portada : ¿Crisis sin fin?, los últimos casos de corrupción, más recortes y nuevos datos la estafa bancaria masiva. Me doy cuenta que empieza a deslizarse hacia abajo…

Un avance en tratamientos oncológicos infantiles hace que vuelva a ascender. Veo que hay una foto a todo color de los jugadores de la Selección , encantados de la vida. El pie de foto reza : A por la final. Sé que a muchos, esto les hará parar la caída pero yo no soy de esos afortunados.

Paso página e inicio la lectura del estado de la nación. La economía da yuyu pero da mucho más terror, esa sensación de incompetencia sumada a la actitud peleona “Tipo-Comunidad-de –Vecinos” que tienen nuestros políticos.

Ya me está bajando hacia el estómago.

Prefiero ir a Internacional a ver que pasa por el mundo. Más economía, más crisis. Otra página y…Siria. Ya hace tiempo que se me ponen los pelos de punta cuando llego a Siria y es que últimamente, el “Conflicto Sirio” ocupa una sección fija.

Una foto de unos niños . Un bombardeo. Escudos humanos. Niños. Siria. Niños.Siento como se desliza por mis piernas y llega a mis pies . Siento que se me escapa.

Hace ese ¡Plof! atenuado y la veo.

Doy el último trago a mi cappuccino y acabo de leer el periódico. Por fin, llego a la Sección de Deportes. Intento contagiarme del “campeones oe, oe, oe” pero me doy cuenta que es imposible. Esta es la última parte de la lectura y ya llego sin ella. Ahora mismo, no tengo alma. Se me ha caído a los pies…

Me agacho y la recojo. Ya está un poco maltrecha.

Debo recordar comprar más tiritas…

 

 

 

Acepto «pulpo» como animal de compañía.

Bendito Paul…

Lo del pulpo, fue el estímulo motivacional definitivo para La Roja.

Impresionante partido para disfrute del personal….Ahora, a por los tulipanes…

La Roja y Los Rojos.

Mañana, todos seremos rojos. A las 20:30 p.m ( sincronizad vuestros relojes!), los españoles y los alemanes del mundo ( además de los otros habitantes futboleros del planeta) se van a sentar ( o no) delante de un televisor para emocionarse y sufrir durante 90 minutos… y espero que para sentir, al final, esos breves momentos de satisfacción por una victoria que, no nos arregla la vida pero sí, un ratito : 90 minutos + los 10 posteriores de regocijo -si ganan- o de ¡Qué injusticia! – si pierden-.

Ya sabemos que ha pasado el «Oranje»  y han borrado el azul celeste ( con lo bonito que es ese color!). La siguiente pregunta es :  ¿ se llevarán los tonos cálidos en esta final , tipo rojo-naranja o se impondrá el siempre elegante color negro ? … ¿Veremos una final nórdica de tíos grandes y fuertes de nombres difíciles de pronunciar ó habrá una fusión de culturas entre ese norte robusto y los españoles más bajitos y escurridizos?…

En esta día previo, la ilusión se nos come, nos ha puesto rojos a todos y , aunque el equipo contrario ( negro) nos da miedo, tenemos esperanza… Y por una vez en la vida, la esperanza se ha cambiado de modelito y no es verde, es roja…

Es posible que tanta energía positiva ( y roja) fluyendo por el cosmos ( los españoles , cuando nos ponemos, nos ponemos) sirva para algo. Por probar no se pierde nada. Así que , basándome en el famoso póster «Keep calm and carry on» que nos invita a mantener la calma y seguir adelante, yo me he hecho otro póster ( rojo,también)conjurando la victoria de la Selección Española .

Por lo menos, que los diez minutos post-partido sean de petarditos, bocinazos y alegría.

No me gusta mucho el rojo pero, mañana, enrojeceré. Seguro.

A por ellos, oé.

Fastidiando el «Todos con La Roja»…

No he conseguido averiguar cuanto cuesta que la Selección española participe en El Mundial. Lo que se lee últimamente afecta al tema de las primas , que ya todo el mundo sabe que son de 500.000€ /jugador ( 24 millones el montante total) dato que refleja que esto es un gran negocio y que el fútbol es , en estos tiempos que corren el verdadero «opio del pueblo».

Lo de que «es un gran negocio», no lo oculta nadie. Todos lo sabemos. El hecho de que este negocio se pueda beneficiar del dinero del contribuyente ( justamente en estos tiempos que corren) es algo que no he podido «descubrir». He encontrado un artículo sobre los patrocinadores y los derechos televisivos que, supongo, compensarían esa «inversión pública». No obstante, no lo sé y sí alguno de los lectores de este post , conoce como se financia y cuanto cuesta la participación en el Mundial 2010, agradecería nos lo comentara.Por curiosidad…

Cueste lo que cueste, del siete de junio al siete de julio, los españoles estarán pendientes de La Roja y sus éxitos, viajarán a un mundo de victorias ( esperanza, hay) y, los 90 minutitos de juego de nuestros chicos, nos harán olvidar lo mal que está la cosa. Es, opio y es para el pueblo. ¿Qué precio tiene eso?.

Lo que sí que he encontrado es la valoración económica de cada Selección ( en el mercado futbolístico) y , ¡adivinad! : el país estará de puta pena pero La Roja es la Selección más cara ,además de favorita,  de este Mundial 2010. Viéndolo desde una perspectiva optimista, nadie nos podrá decir que no tenemos «algo» que vaya bien… Recuperación económica, no pero una Super Selección, sí. Ago es algo.

Pero lo que me ha impactado buscando esta información de costes económicos, es un dato escalofriante que ha hecho público la ONG InspirAction y que pone de manifiesto que este mundo es, como decía Mafalda, un manicomio redondo.

Ahí va:

Inspiraction denuncia que el coste del mundial de fútbol cuadruplica la inversión contra el sida en dos años en Sudáfrica.

Más de 5 millones de sudafricanos conviven con la enfermedad, constituyendo el triste récord del país con mayor cantidad de personas con VIH. Las cifras empeoran si se tiene en cuenta que cada año se infecta otro medio millón, y hay cerca de 1000 muertes diarias.

Por un lado, te desconcierta que un sistema «organizado» de países invierta , en algo como el fútbol, un montante económico que salvaría muchas vidas. Son capaces de organizarse para dar pataditas a una pelota ( muy bien pero pataditas al fin) y no son capaces de cumplir con los objetivos de prevención y erradicación de esta enfermedad en África. Por otro lado, tal vez la presencia mediática de un país con una problemática tan grave , permita concienciarnos , responsabilizarnos y ayudar en esta labor.

La realidad de este Mundial es que , ese mes en que el mundo entero estará pendiente de la Competición, cada uno de esos 30 días, 1000 personas morirán de SIDA en el país que acoge la celebración.

Dicen que «ojos que no ven , corazón que no siente» pero yo, ya lo he visto. Y si habéis llegado hasta aquí, vosotros también. Y, desgraciadamente, se me ha fastidiado el ánimo y La Roja y todo eso… Es lo que tiene vivir en esta casa de locos.

Si quereís participar en la campaña de InspirAction «Márcale un gol al Sida», visitad su web .

N. B Sin embargo, no todas las noticias son malas: al parecer las campañas de prevención parecen estar dando lentamente sus frutos, y el uso de preservativos va paulatinamente en aumento. Al menos un dato esperanzador.