Credo Shop

Había llegado el día.

Tras mucho pensarlo, tras darle muchas vueltas, tras marearlo, subirlo y bajarlo, había llegado el momento de adquirir un credo.

Se arregló con especial interés. No era una jornada cualquiera, cuando volviera a su casa, sería una creyente. ¿En qué? Esa era la incógnita pero…creería en algo… Se puso una blusa camisera de color blanco y puro porque pensó que era apropiado para aquella tarde de shopping de creencias. Eligió un traje chaqueta hecho a medida de color gris marengo. La americana era entallada y la falda, le quedaba ajustada a las caderas hasta la rodilla. Ser creyente no era excluyente de ser sexy, ¿no?

Los zapatos de tacón muy alto y fino le parecieron demasiado presuntuosos y se decidió por unos más austeros, con un medio tacón que le hacía parecer más bajita y chaparra pero se desabrochó uno de los botones de la blusa para compensar el efecto. Se miró al espejo y le complació lo que veía : una mujer adulta, decidida, reflexiva…que se iba a comprar una creencia.

Dudó a la hora de escoger el bolso que llevaría. Un credo. ¿Pesaría mucho? ¿Era voluminoso? O, por el contrario, ligero como una pluma y pequeñito, como para llevarlo en un bolso bombonera. Nadie le había sabido explicar cómo era un credo, así que , ganó su lado práctico y se colgó del brazo una bandolera de tamaño mediano, que podía llevar cruzada si , al final, resultaba que las creencias pesaban demasiado.

Se sentía muy alegre. Por fin, había decidido creer en algo… Ya era hora de poder contestar a aquellas preguntas : ¿Perteneces a alguna religión? , ¿Tienes alguna creencia? Y, finalmente, la definitiva : ¿En qué crees?. Hasta ese momento de su vida, no había necesitado uno de esos credos. Había crecido en una familia afectuosa, rodeada de bondad y nunca se había planteado en que creía. Debía buscar un Dios. Una Cosmovisión. Una Espiritualidad. Algo en lo que creer…Por normalizarse. Los últimos años habían sido duros. Sus padres fallecieron en un accidente y sólo el gran amor que siempre había rodeado sus vidas , le permitió salir de ese gran pozo de tristeza que la engulló. En esa época, se dio cuenta que los que “creían” se sentían más confortados que ella . Parecía que tomaban un atajo…

Después, se enamoró de un hombre maravilloso pero… él sí que tenía una creencia. No era una de las típicas …No. El novio tenía un credo exótico : pertenecía al Movimiento Raeliano. Íban al cine, salían a cenar, tenían sesiones de sexo fantástico, conversaciones interesantes y mucha afinidad hasta que salía el tema de la Iglesia de Rael. Ella intentó comprender eso de la transferencia mental y la inmortalidad. Lo intentó con todas sus fuerzas pero fue imposible. No lo entendía. No se lo creía, vaya.

Creencias, creencias… Sus amigas , en el trabajo, hablaban de catolicismo en su versión de bodas, bautizos y comuniones. En cambio, en el supermercado , la cajera le intentaba convencer para que asistiera a una misa evangélica. En las clases de yoga, le habían hablado de la Ley del karma, del Hinduismo… Richard Gere, Budista. Tom Cruise, Cienciólogo…Todos creían en algo, incluso los que no creían en nada, creían en eso…pero ella no era ni atea, ni agnóstica…No sabía qué era aunque fuera feliz y, con la edad adulta, necesitaba una de esas creencias …para explicar su felicidad, por lo menos.

Llegó a la fachada de Credo Shop.

La tienda era preciosa. Cuando entró en aquel espacio blanco e inmaculado, lo primero que sintió fue una paz interna que ya no recordaba. Sólo la había obtenido en el pasado, en los brazos de su madre. Un gran mostrador, también blanco y brillante, delimitaba la zona de atención al público. A ambos lados, había unas estanterías de un diseño ingenioso que parecían estar suspendidas en el aire. En cada una , unos rótulos plateados anunciaban su contenido. Mientras tocaba el timbre que había en el mostrador fue leyendo : Cristianismo, Islam, Budismo, Hinduismo, Religión tradicional China, Religiones indígenas, Religiones afroameriacanas, Sijismo, Espiritismo, Judaísmo, Baha’s, Gnosticismo, Jainismo, Shintoismo, Caodaísmo, Zoroastrismo, Tenrikyo, Neopaganismo, Unitarismo universalista, Rastafarianismo, Cienciología, Religiones Varias ( Rael, Tribu Yaohanen…)

Se mareó. ¿Había tantos credos?

-. Señorita, ¿La puedo ayudar en algo?- un hombre muy alto, vestido con una bata blanca de laboratorio, la miraba fijamente. Una media sonrisa se dibujaba en sus labios.

-. Mmmm. Venía a comprar una creencia pero me ha abrumado ver que hay tantas para elegir. ¡Hasta me he mareado!

-. Tranquila, suele pasar. Dígame, ¿Había pensado en algún credo en especial? ¿Tiene alguna inclinación personal?

-. No he pensado en nada concreto. Querría algo que fuera sensible, compasivo, ético. Sin restricciones de vestuario, quiero poder ver la belleza del mundo, que se base en el amor a los demás…- Miró al vendedor- ¿Demasiadas cosas?

-. No, siga, siga. Cuanta más información, más podremos acertar en la elección.

-. A mí me funciona lo que me decía mi madre : Trata a los demás , como quieras que te traten… Ah! Y aquello de que una sonrisa gana la más dura de las batallas…¿ Hay alguna creencia que adore las sonrisas? -Preguntó esperanzada.

-. Yo la veo rodeada de mucha espiritualidad y afecto pero si insiste en tener una creencia, yo no le voy a decir que no. Estoy a quí para vender, señorita. A ver, dígame ¿ Se mueve en un ambiente conservador o liberal? ¿De qué trabaja? Si trabaja en el barrio de los Diamantes de New York, yo le aconsejaría el judaísmo. Si es Guía de Viajes en Jamaica, el Rastafarianismo puede encajar…El Cristianismo, también funciona en muchos ambientes. Ahora tenemos de oferta, el católico no practicante. Se cree lo que hay que creer pero no practica el culto…El Islam ya no se lo ofrezco, ya que no se quiere tapar… No sé. Puede ver que hay muchas opciones.

-. Y, ¿Hay alguna verdadera?-preguntó desesperada por elegir. Nunca hubiese pensado que sería tan difícil escoger la correcta.

-. En realidad, la verdadera es la que la haga ser mejor persona. No importa cual si lo que hace es mejorar su humanidad…

-. Mmmm. Ya.- ojeó la información- Pues me lo voy a tener que pensar… De verdad, creo que intento mejorar cada día. Y ayudar a los demás. Y sonreír… Y sin credos, ni nada de nada… No sé…¿Tiene muestras de las creencias más importantes para que las pruebe?.

El vendedor le preparó un paquetito con unas muestras mientras ella miraba el contenido de la estantería consignada para la Iglesia de Rael .

Cogió la bolsa con cierta aprensión. Si el objetivo era “ ser mejor”, ¿Por qué debía gastarse el dinero ( las creencias estaban carísimas!) en una? Le prometió que las estudiaría y volvería y se marchó de la tienda, abrumada por las dudas y con exceso de información.

El hombre de la bata blanca, vendedor de creencias, la observó mientras ella caminaba calle arriba, con su bolsa, con el nombre de “Credo Shop” grabado en letras blancas.

Supo que no la volvería a ver por allí: aquella mujer ya creía…

 

¿Por qué está colgado ese señor?

Buscaba una imagen en la que se representarán las religiones más significativas de nuestra era, cuando he encontrado esta portada de un monográfico de ¡Dios Mío! de José Luis Martín ( www.eljueves.es). Me va de perlas…

Todo este «globo sonda» de la retirada de crucifijos, no es más que un despiste social para que tengamos algo de qué hablar , diferente al paro y la recesión.

Los padres que llevan a sus hijos a un colegio laico no esperan un crucifijo .

Si, por un casual, los niños van a un centro concertado(religioso )y allí hay una cruz, pues hay una cruz. Ningún problema. Si por el contrario, se ha elegido una opción tipo «Escolapios» ,el debate no existe. Ahí hay crucifijo . Pero nadie ha salido a tomar las calles, ni se estira de los pelos al ver la cruz. Eso es lo de menos.

Lo que si les preocupa a esos padres es que España no llegue a los Objetivos Educativos del Pacto de Lisboa para el 2010. O que el 25% de los niños tengan problemas de compresión lectora ( no entienden lo que leen) frente al 4% de los niños filandeses ( país que sí que ha llegado a los objetivos del pacto)…

De pequeña ,asistía a un cole de monjitas . Mi madre siempre explica que los primeros días  , estaba aterrada. Tengo un recuerdo difuso de ese miedo pero sí que recuerdo lo que me daba terror …Y era un gran crucifijo labrado con un Jesucristo muy, muy detallista y casi a tamaño natural . Una pesadilla para una niña de 6 años: un  hombre, con clavos en los pies y en las manos, sangre en la cabeza, tajos por el cuerpo y aquella mirada tan triste. Al final, me acostumbré. Todos nos acostumbramos. Y si lo piensas detenidamente, nos entrenamos para ser indiferentes ante el hecho de tener colgado el símbolo de una crueldad, el ejemplo de una tortura, una imagen sangrante y violenta… Mala elección de logotipo, como dirían los de marketing…

Hace unos años, llevé a mi ahijada a su primera Fiesta de La Palma consciente. Digo»fiesta», porque lo que hacíamos era volvernos locas agitando la palma, con todos sus amiguitos y, después, irnos a una pastelería cercana a la Iglesia, a ponernos moradas de helado…Nada de religión. Todo ocio.Pero ese primer año , en el que la niña  entendía lo que sucedía, al entrar en la Iglesia, me pregunta : ¿Por qué está colgado ese señor? ¿Le hace daño?.

Yo, personalmente, estoy a favor de la retirada del crucifijo en los colegios sin ninguna vinculación religiosa. Pero si crea tanta polémica, por mí que los dejen colgaditos  y centren sus energías en trabajar por una enseñanza de calidad.

También tengo claro que la mejor religión es ser buena gente y no sé si eso tiene algún símbolo asociado.

Si existe, que lo pongan en todas las escuelas del mundo…

Abdul y Pecha

bad_heart__by_wassaElla, Pecha . 19 añitos. Suní.

Él, Abdul. 21 años. Chií.

Los dos, jovenes y enamorados , en la provincia de Nimroz en Afganistán. Allí, ser Chií es ser un hereje.

Un amor imposible que solo tiene una posibilidad. Huir hacia otro lugar donde la diferencia de doctrina religiosa no suponga un delito con condena a muerte. A un lugar donde poder amarse …

Pero no.

Los talibanes , monstruos con poder legal, los capturan en su huída hacia Irán. Tres imanes dictaminan la fetua. Pena de muerte.

Los llevan a las puertas de la mezquita, a Abdul y a Pecha, de 21 y 19 años.

Los fusilan. Los ametrallan.

Mueren asesinados los dos, Abdul y Pecha. Enamorados y jóvenes.

Esto ocurrió anteayer.

Sus nombres : Abdul y Pecha.

N.B : La ilustración pertenece a la galería de un arista pañameño ( Wassa) en Deviantart.com.

Menos mal que resucitó…

crown-of-thornsNo quiero herir los sentimiento ( ni la fe) de nadie, así que me permito advertir ( tipo spoiler) que esta es una reflexión que no gustaría a mi suegra ( católica convencida y además, sincera practicante).

Aún me causa una cierta desazón el sentirme tan alejada ( a millones de kilómetros luz, vamos) de la doctrina religiosa que me acompañó durante mi formación de vida pero , a medida que ésta va transcurriendo, me he hecho creyente de Las Buenas Personas .

Me bautizaron ( festejo social ), fuí a colegios religiosos ( monjas y curas -Escolapios para más INRI-) solo por una cuestión de cercanía geográfica y supuesta calidad de enseñanza. Hice la comunión ( otro festejo social que me encantó por lo del vestido y la comida-banquete familiar con payasos y los regalos). Me confirmé ( lo hacían todas en el cole). Iba a misa los jueves por que era obligatorio ( menos mal que cantaba en el coro!) y me confesaba por qué también lo era. Tal vez la confesión, sea uno de los recuerdos más gratos que tengo de aquellos tiempos : podía pelearme con mi hermano a tutti pleni que despues, tras decírselo a Mossen Joan y recitar unas Ave Marías , ya estaba limpia total. Mi familia no iba a misa los domingos: solo a los festejos ( además de bautizos, comuniones y bodas, también nos adheriamos a la bendición de la palma). Eramos católicos no practicantes.

Al alejarme del cole e ingresar en el mundo de la Universidad, cesó mi contacto con la religión católica ( hasta el antiguo C.O.U tuvimos Religión como asignatura obligatoria. Un tostón. Una maría. ). Seguía asistiendo a los festejos y de la misma forma, me casé por la Iglesia. Y digo, de la misma forma, refiriéndome al concepto festejo . Vestido, banquete, fiesta , regalos y viaje. Todo el pack.

Mientras he ido caminando la vida, se me han aclarado algunos conceptos: 1) Tu pertenecia a una religión suele ir ligada a una situación geográfica. ¿Qué sería si hubiese nacido en la India, China o Marruecos?, 2) Ninguna es verdadera o falsa. Todas se autoproclaman ciertas. En la actualidad, si puedes ( qué aunque parezca increíble hay muchos, muchos lugares en los que NO puedes), podrías elegir entre todas las opciones la que más se ajusta a tu espiritualidad. 3) Son los actos ( simples y objetivos) los que hacen que una «creencia» sea verdadera. Es verdad lo de esa mujer pequeña , de nombre Teresa, que dejó sus actos objetivos dando frutos en Calcuta. Es verdad lo de Vicente Ferrer y el milagro de Anantapur. Es verdad lo de esas monjas y curas, monjes, de cualquiera de las religiones del mundo que están ayudando a otros en cualquiera de los rincones del mundo. El Vaticano, con sus túnicas bordadas en oro y la opulencia , no parecen verdad.

También, Jesucristo me parece verdad.Es una de las figuras históricas que más me ha llamado la atención en todos estos años. Tengo esa imagen típica , de un tipo guapo con pelo castaño y barba. Vestido con túnica y sandalias y predicando algo así como un «buen rollo» general entre los habitantes del planeta. El primer líder positivo. Aunque , después, los sabios que escribieron sus andanzas, se dejaron llevar por traducciones literales e inconsistencia de datos así como excesiva utilización de metáforas y nos han dado un perfil de Jesús de matices literarios. Pero existió una persona que daba mítines y congregaba seguidores. Una persona a la que se trató con una crueldad extrema que ejemplifica la Maldad (con M mayúscula) del ser humano. La película de Mel Gibson sobre Jesús me tradujo, en términos reales, lo que significaba todo aquello de la pasión . La Tortura sin límites de un grupo de hombres sobre otro, de la misma especie. La película te encoge el corazón ya que sabes que puede llevar la leyenda «basada en hechos reales» así que lo mejor es elegir entre estas dos opciones :  a) Todo es mentira y esta historia es una ficción de unos narradores fabulosos y b) Si hubo un hombre como Jesús y le hicieron todo eso, hay que intentar creer en el catolicismo , por lo menos hoy , ya que el final de la historia es un final feliz en el que Jesucristo resucita… Qué triste es todo esto, ¿no?.

Casi que prefiero celebrar el Easter y festejar que llega la primavera a nuestras vidas .

Y las flores y el color.

Decorar todo con huevos pintados en colores chillones, conejitos de chocolate y ramos por doquier y olvidarme de cruces, clavos, coronas de espinas, lanzas y sangre.

Me quedo con los huevos… y con Las Buenas Personas.easter-eggs

Anacronismo perfecto : la iglesia.

Vaya por delante que yo soy uno de esos clientes, a los que la Iglesia Católica ha perdido ya hace mucho tiempo…. Mi familia no ha sido religiosa. Por lo menos, no lo ha sido en los verdaderos términos del concepto. Nosotros ( y me refiero a los míos), hemos sido católicos «sociales». El cole de mi infancia, primero fue de monjas y después, en plena adolescencia , de curas ( Escolapios). La razón de esta elección de escuelas fue puramente geográfica: estaban muy cerca de casa… Del bautismo, las fotos son una prueba gráfica de que a mi familia le gustan las fiestas. De la comunión, recuerdo mis nervios pero no por el acto religioso … Pensaba en la juerga que se había organizado con todos mis primos y con payasos y todo!. De la Confirmación, nada de nada. Acto muy sobrio con las monjas y mucho cachondeo en el coro ( con lo mal que lo hacía, ahí estaba yo tocando dos acordes en mi guitarra….). Los Evangelios, La Biblia, Las Misas ( a las que yo no iba si no era por obligación : bodas, funerales y las «voluntarias» para no catear Religión.), No comer carne según que días ( super alucinantes los bocatas de tortilla que me preparaba mi madre…), etc. etc.,,, A todo esto, en mi entorno la mayoría íbamos por el mismo camino. La Iglesia Católica estaba ahí pero como si no.

La primera reflexión sobre el anacronismo , la hipocresía y la falsedad empezó con los cursillos prematrimoniales y la parafernalia de documentos y tonterías para casarse por la Iglesia. Hoy, no lo haría pero hace quince años había una fiesta social que celebrar y unos padres a los que contentar. No hubo ningún problema. Ya os he dicho que nos gustan las fiestas…

Un rollo lo de los papeles y los líos de traslado de parroquía. Pero lo mejor , estaba por llegar : un tipo de unos sesenta años, aparentemente célibe por lo que no experimentaba sexo en ningún formato y que nunca había vivido en pareja me hablaba de los deberes conyugales en el matrimonio. Cuando salí de ese tormento de una hora, el cura me señaló a una mujer que tenía problemas en su matrimonio y que acudía a él en busca de orientación. «Nuetra labor no acaba uniéndoos en matrimonio»-me dijo. Impresionante!!!. El tío , no sólo no tenía ni idea de lo que hablaba sino que, además, por obra y gracia de Dios, se convertía en un experto.

¿Por qué los curas y monjas deben ser célibes?, ¿No es eso antinatural?, ¿Por qué no pueden formar una familia?, ¿Por qué las mujeres no pueden oficiar misa? ¿Por qué no revisan sus normas ( que no son divinas, son terrenales) y las adaptan a los tiempos reales?, ¿Por qué se niegan al uso del preservativo ? , ¿Por qué no donan parte de sus abultados ingresos, gestionados por sus Bancos para sus obras? , ¿Y todas sus joyas? , ¿Por qué no crean hogares de acogida en cada uno de los infinitos «inmuebles» que tienen desperdigados por el planeta?, ¿Son de verdad buenos o solo dicen que lo son?…

No hace falta ser «religioso» ( elige la religión que quieras) para ser gente de bien. Jesucristo me gusta como figura histórica, como líder. Seguro que era un buen hombre. He conocido curas y monjas que también lo son y que trabajan en lugares peligrosos, sacrificándose por los demás. También he conocido a voluntarios de ONG’s que podrían ser elevados a los altares y gente corriente, mucha, que hace lo que puede por los demás , en lo cotidiano, en la vida real. La que vivimos fuera del Vaticano.

Todos estos seres humanos son mi única religión.

N.B : Y me pregunto, si eres cura y pecas de pensamiento «involuntario» al ver un escote y tienes una reacción fisiólogica normal, como es una erección y no te confiesas ¿Vas al infierno?.