Piedras Preciosas ( que no lo son).

Ayer, si no fuera por el pequeño detalle de la incursión armada de las fuerzas «aliadas-al -petróleo» contra Libia, fue un dia precioso.

Me sorprendió ver en las noticias, ya por la noche, que se había declarado la guerra en el Mediterráneo . De ahí, justo de la orilla de ese mar que baña la Costa Brava, de ahí venía yo, ufana y satisfecha con mis piedras preciosas (que no lo son) , a puñados, estirando los bolsillos de mi chaqueta.

Mientras me entusiasmaba recogiendo los cristales pulidos que las últimas tormentas arrastraron a la playa, los señores que dirigen el mundo ( más o menos) decidían atacar un país mediterráneo. Es una de esas situaciones en las que los sentimientos son contradictorios : ¿Vamos a dejar que un tirano diabólico masacre a un pueblo? y ¿Vamos a ser nosotros los que respondamos, también con guerra, en nombre de la defensa de ese pueblo?. ¿Qué decisión es la acertada?.Encima,  le han hecho la cama al tirano diabólico durante décadas porque necesitaban su petróleo y  lo que pasaba con ese pueblo que ahora vamos a salvar no nos importaba lo más mínimo.

Bueno, supongo que mataba menos y el ojo público no estaba allí. Ahora, mata más y casi que en directo así que…

Lo del «Bien Común» , algo que se ha hecho evidente en la sociedad nipona , es algo que el resto de sociedades del mundo no ha trabajado demasiado como concepto. Todos esos intereses económicos, políticos, territoriales, religiosos,…que no conocemos los pertenecientes a la «sociedad base» han creado un mundo egoísta en lo que lo importante es el YO. Si no nos ponemos de acuerdo a un estrato tipo comunidad de vecinos, no hay que ser Einstein para imaginar lo que será eso a nivel de gobierno de un país o de gobiernos de países juntos en un fin común…

No existen Organismos Internacionales Globales y Que Representen al Mundo que velen por el Bien Común. No. Lo que hay son débiles reflejos de lo que debería ser. Si así fuera, no hubiéramos dejado que los tiranos diabólicos ( hay más de uno) pudieran dirigir ( masacrar y humillar) a los pueblo e incluso, participar con voz y voto en estos Organismos Comunes del Mundo.

Mientras recogía los cristales pulidos que me regalaba el mar , había otras personas , en otra orilla del Mediterráneo, que no podían hacerlo. Estoy segura que a mucha gente del mar, le fascina esto de los cristales azules, verdes, transparentes , brillantes… Y que los recogen… pero en estos días, no va a poder porque los aviones-los buenos y los malos- bombardearan su playa…

Y, yo, allí,ajena a todo eso,  tranquila, absorta con la mirada perdida en la arena, llenando mis bolsillos…

Si me preguntas que hubiese hecho yo, me doy cuenta que  es muy difícil decidir. Por un lado, deseo que acaben con los tiranos diabólicos pero, por el otro, no puedo evitar pensar que la gente normal, esa que recoge los cristales pulidos de la playa, va a sufrir sea cual sea la decisión.

Ahora, ya metidos en el fandango, lo importante es que esto se acabe pronto. No importan esos gobiernos con intereses ocultos, ni las fachadas públicas de héroes del mundo, ni siquiera importa la suerte que corra el tirano diabólico…lo importante es la gente. La normal.

Esa que intenta vivir cada día y que , alguna mañana de pre-primavera, se dedica a recoger esas piedras preciosas ( que no lo son) que nos trae el Mediterráneo…

Otros tiranos diabólicos:

La mordaza imposible.

Valen por mil

 

 

Corramos un tupido velo…

…y sigamos avanzando. Tranquilos…

No dejemos que nadie nos manipule ( ni los del velo ni los que no) y nos compliquen  las cosas que son sencillas para la gente normal .

La mayoría de los que moramos el habitat hispánico, no tenemos ningún problema con la libre expresión de : ideas, religiones, modas, tribus urbanas, etc,etc,… Podemos pensar lo que queramos, podemos ser cristianos, musulmanes, budistas o nada , podemos ser siniestros o hippies, podemos colgarnos un crucifijo o un símbolo del dólar al estilo rapero porque somos hip-hoperos… Por poder, podemos todo . Somos libres.

Otra cosa es que , en situaciones colectivas, se deben imponer normas para regular . En el marco de la enseñanza ( y más en la adolescencia), no es descabellado que existan reglas internas , como las del Instituto Camilo José Cela de Pozuelo . Ni gorritas, ni viseras, ni velos, ni nada que cubra la cabeza. Por lo tanto, no estamos ante un problema de retriscción de libertad religiosa . Estamos ante una norma  que atañe a cualquier alumno del centro, independientemente de la religión a la que pertenezca ( que también puede ser» ninguna religión»). Y ya está. Es así de fácil.

Si este es un país integrador , lo que deberá ofrecer al alumno que se niega a atender esa «regla interna», es otro centro en el que ésta no exista y , por lo tanto, pueda ponerse el hiyab o una boina. La escolarización siempre será posible y eso es lo realmente importante de todo este tema. La niña Nawja , podrá seguir formándose. Debera tomar una decisión ( tan joven y ya en una encrucijada de este tipo…): Si  quiere llevar velo deberá cambiarse de Insti. Si quiere estar con sus amigas, deberá quitarse el velo: lo bueno es que puede elegir. Lo malo es ¿puede elegir?.

Yo tengo un profundo respeto por todas las creencias de bien pero esto del velo, no me gusta. Supongo ( quiero creerlo) que hay mujeres que lo llevan libremente ( que no quiere decir «por costumbre») pero me llega tanta información que liga el velo a represión que lo asocio a una imposición . Habrá niveles de intensidad distintos  en dicha «imposición» ( por tradición familiar /cultural pero sin traumas o por miedo a que te arreen 80 latigazos si se te ve un mechón de pelo ..) pero no deja de ser imposición. Y eso , a una mujer mediterránea -sin religión  definida- y libre, como que no. No gusta.

Y aunque el hijab (burka, niqab, shayla, chador)  dé un poco de yuyu,  el respeto que mencionaba anteriormente, también nos permite aceptar ( sin problemas) que una mujer quiera cubrirse sea monja , musulmana o siniestra… Si así lo decide, en libertad total.

Así que , no hay que darle muchas más vueltas al velo, y actuar con normalidad. Los muy de un lado y los muy del otro, se aprovechan de nuestra atención selectiva y de la exposición mediática y quieren magnificar una situación que de haber sido tratada con naturalidad, no hubiese llegado a los telediarios nacionales ( que ni falta que hacía).

La normalidad es la regla de los normales. No hayque complicar las cosas…

Lo mejor, pués, es correr un tupido velo…

Para ver lo que se ve tras un burka ( por ejemplo), aquí .

N.B : Dejo una Web de moda musulmana trendy. Hijab Style.