De momento y , como primera cosa positiva del día, alégrate de estar despierto.
Tiene algo de mágico eso de abrir los ojos cada día, y ver que el mundo sigue donde lo dejaste ayer. Habrá un día en que no te despertarás y entonces, entenderás ( supongo!) lo perfecto y maravilloso que es hacerlo día tras día.
Parece fácil pero tiene su mérito…Como te decía, sonríe pues estás despierto, vivito y coleando y con un día por delante. Desperézate lentamente y disfruta del cappuccino ( café con leche, café, té…) de la mañana.
Una ojeada al periódico y la voz del señor de la tele que te dice que «han aumentado los contagios pero se han estabilizado las hospitalizaciones gracias a la vacunación «te situarán en este universo.Cuando lo tengas todo un poquito más claro , estarás preparado para la ducha matinal.
Con tus neuronas funcionando, ya estás preparado para vivir este día. Ahí estás, con los ojos abiertos , dispuesto a no perderte nada.
Practica con regularidad el «buen despertar»: no dejes de felicitarte ni un día por haber abierto los ojos, por tomarte ese café, por la ducha, por el día que empiezas y vas a caminar…
Y si el día que viene es complicado, piensa que en algún momento volverás aquí , te sacarás la ropa del día y el día habrá pasado. Lo dejarás atrás y, de nuevo, dormirás. Y como por arte de magia, al día siguiente , abrirás los ojos y te darás cuenta que sigues aquí, que es un nuevo día.
Estarás preparado para disfrutarlo, de nuevo y si se deja.
Estas aquí y ahora y este día te pertenece.
Y no olvides coger tu mascarilla y el gel hidroalcohólico …
NB: Este texto es una actualización del «Buen despertar» que , en realidad, es un cuadro que surgió de una improvisación con un bastidor y un rotulador negro. Lo tengo a la vista cuando me despierto…
Y quizá algún día te despiertes y la voz del señor de la tele no diga «La Ronda está colapsada». Ése podría ser el comienzo de un nuevo mundo…
Tienes razón aunque …también puede ser que La Ronda no esté colapsado pero si el espacio aéreo por los coches voladores! ;-)
Saludos!
Sí, es un privilegio, tener la oportunidad de seguir luchando por sobrevivir, sin lugar a dudas es todo un reto. Besos a tu corazón.
La mayoría de los días, por eso, no somos conscientes del privilegio…Es un fallo de serie del ser humano.
Besos!
Y aunque te moleste dar las gracias al perro por venir a husmearte y a los gatos por esperarte. Eres importante. Siempre.
Gracias, esa reflexión es para recordarla cada mañana. Sin ti el mundo, sencillamente, no existe.
Le decía a María del Mar que, por un fallo de serie de la especie, estamos programados para olvidar el privilegio de despertar cada mañana…A ver si nos lo arreglan.;-)
Besos, Efw
Despertar merece la pena cuando te espera una taza de café.
Buenos días.
Sin café, no es lo mismo…Yo sin mi capuccino matinal, no soy nada…;-)
Me encanta.
Besos!