Pauta completa.

Creo que mi sonrisa – tan grande que era evidente tras la mascarilla- ante la inminente segunda dosis de la vacuna y la euforia victoriosa del que me acompañaba ha obligado a la enfermera a recordarnos : 1) la inmunidad no la alcanzaremos hasta dentro de dos semanas y 2) es del 95%, no total.

La sensación post-vacuna es de un alivio inmenso, pero esto no ha acabado .

Y es verdad que hay que ir recordándolo.

Be careful .

Dosis I

Todo ha sido tan rápido, fluido y eficaz que no he tenido tiempo de emocionarme…Eso sí, le he dado las gracias al personal sanitario con más efusividad de lo normal .

Ya sentada , en los quince minutos de rigor tras administrar la dosis, he empezado a sentir eso que me habían etiquetado con palabras como “Felicidad”, “Satisfacción”, “Alegría”, “Alivio”…

Son todas esas palabras juntas…

Últimas flores .

Llegó a casa en octubre. Es una planta que ha marcado mis tiempos pandémicos.

La camelia, el arbusto que florece en invierno, ha cumplido con lo prometido y ha estado recreándose en bellas flores todo el invierno.

Ahora, ya en primavera, sólo quedan tres ejemplares.

Dos a punto de caer .

Y una que aún tiene ese tono rosado intenso.

Cuando esta última flor desaparezca, la camelia será un arbusto verde durante todo el verano. Hasta que vuelva el frío.

Cuando emerjan los primeros capullos, habrá pasado un año y, espero poder dar testimonio fotográfico de cómo vuelven a abrirse las flores, mientras escribo que el mundo ya está a salvo del virus…

Tenemos una cita.