Lo de la colchoneta ha sido un desastre…parcial.
El error esencial ha sido la elección del modelo. Un extraño “dos piezas” que se podía convertir en sillón o colchoneta al uso.
El diseño hace que haya una zona, en el centro, en la que no hay área inflable. Como era de esperar, esa es la zona en la que aterrizas cuando intentas estirarte y la misma que se dobla, con efecto “V”, dejándote en medio, en la susodicha posición: en “V”.
En alguno de los intentos, aguantando la colchoneta a cuatro manos, uno conseguía estirarse, pero, al intentar subir hacia la zona del reposa cuellos, se volvía inestable.
La colchoneta me ha expulsado de su territorio. Tenía vida propia … Revolcones continuos y continuos intentos de dominarla.
El desastre es parcial porque esta extraña pelea con el artefacto flotante, me transportó a momentos veraniegos ( y muy felices) de mi infancia.
Nada como tragar un poco de agua de piscina para recordar la niñez…
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