La ducha diaria es un acto mecánico que nos sirve para alcanzar los niveles mínimos de higiene exigidos para la vida social. Hay quien lo hace al levantarse y quien lo prefiere por la noche. En mi caso, un cappuccino y la ducha ( en este orden estricto), son necesarios para dejar de balbucear y pensar con normalidad. Es ritual prioritario por las mañanas…
Hay veces que la ducha toma otro matiz. No solo limpia sino que también reconforta y te devuelve al mundo. Esas duchas, no tienen nada que ver con las matinales. Hablo de esas que se producen después de haber estado jugando con tus hijos en la tierra , tras la poda de los arbustos de tu jardín, al acabar una mudanza de esas “totales” donde las cajas se reproducen como setas , … Simplificando: las duchas post ejercicio físico y sudor ( a elegir ; – ) ).
Estas duchas “especiales” nos dan su máximo punto de confort cuando nos la regalamos después de una sesión de deporte. Entonces, el sudor ya se ha peliculado en tu piel, los músculos están doloridos y tienes calor .
En esa situación, el agua se derrama por todas las fibras del cuerpo y proporciona un alivio fabuloso.
Si has practicado deporte al anochecer, esa segunda ducha del día va seguida de un pijamazo … El pijama y la sensación de cansancio reconfortante son el colofón final. Una cena ligera y el sofá o la cama y no se le puede pedir más al día.
Tras liberar endorfinas a diestro y siniestro, estoy sumida en lo que llaman «el cansancio dulce» y es tan dulce ( estoy molida …de dulzura) que me obliga a dejar de escribir ahora mismo (eso que me cae encima de los ojos y no me deja ver bien las líneas… ¿Son los párpados?) para irme a mi súper-cama, a abrazar mi súper- almohada ( imposible abrazar nada más), pensar que mañana será otro día, cerrar los ojos y…
…zzzzzzz….
NB : zzzzzzz funciona como onomatopeya del sonido de la respiración al dormir…Aunque parece que su origen es anglosajón…Snooze… Para imaginar la onomatopeya en español hay muchas opciones : rrrrrr, fiu fiu fiu, sssshhh, sihhhh… ; – )
y lo más importante es ser regular. Hay que ducharse una vez a la quincena ¡NOS HAGA FALTA O NO!
La diferencia de duchas, en quince días , es de 14 a 1…Uf!!
Como siempre, certera!! :-)
Qué buenas esas duchas reparadoras!!!
A mí también me pasa como a ti por las mañanas, sin una ducha no soy nadie…
Besos.
Y el café con leche….Los dos, indispensables!
jajaja ducha para abrir los ojos, café para dejar de gruñir y ser «gente» =D
Es que si no, es muy difícil socializar…;-)
Sin duda parte vital de mis mañanas también!
Sin eso, como dice E. , no somos gente… Saludos!