Las caras.

Pensé que era un Tió navideño tardío y abandonado, pero, de repente, a cada paso, una cara.

Aprovechando el lienzo de las ramas podadas.

Es Forest Art. O Beach Art, a elegir.

Y es que detrás de esos pinos retorcidos por la brisa del mar y llenos de caras, estaba esto.

Puedes leer, puedes escribir , puedes hacer lo que quieras...

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.